Let’s Be Frank

El 26 de diciembre podrás ver en vivo por Red Bull la nueva película de Frank Solomon, con la participación de John John Florence y con música de Ben Harper. Let’s Be Frank no es un film de surf. Bueno, no sólo de surf. Es una cinta acerca de Frank. Probablemente no sabes quién es este surfista de olas grandes sudafricano, pero el tráiler  va a despertar tu curiosidad. Te dejamos una entrevista

Frank, ¿cómo está yendo la presentación de la película?

Acabo de regresar de Durban, y antes estuve en Los Ángeles y en Ciudad del Cabo, que es mi ciudad. ¡En la presentación en Durban había 400 personas! Ha sido una locura. Mucha resaca. A la gente le encanta la película.

Sin contar mucho más, digamos que hay toques de Quentin Tarantino y Wes Anderson en la película, también del Club de la Lucha. ¿Cómo fue el guión?

Todavía no entiendo el guión. Realmente sólo lo vi cuando ya llevábamos dos años filmando la película. Desde el comienzo he confiado plenamente en Pete. Sabía que estaba haciendo algo bueno.

¿Crees que Let’s Be Frank cambiará la percepción que la gente tiene de los filmes de surf?

Eso espero. Cuando Pete y yo comenzamos, lo que queríamos hacer era algo diferente. Que no se hubiese hecho antes. La mayoría de las películas de surf son básicamente iguales, una ola tras otra. No hablan de la gente, sólo de surf.

¿Cómo comenzó todo esto?

He estado viajando, tratando de brillar en el WSL Big Wave Tour. Buscando el éxito como surfista de olas grandes. No hay muchas oportunidades para engancharte al tour, así que estaba buscando hacer algo diferente. Conocí a Pete en un bar y me dijo: “Eh, Frank, veo que siempre estás viajando por el mundo, viviendo una vida maravillosa”. A lo que le contesté: “No, eso parece, pero para subsistir tengo que vender árboles de Navidad, trabajar en restaurantes, en la construcción, durmiendo en los sofás de otra gente… No es una vida glamurosa”. Entonces Pete me dijo: “Hagamos una película sobre eso”.

Vale, entonces, ¿quién es Frank?

Creo que mucha gente se puede ver reflejada en mi historia. No crecí como Jordy Smith o Gabriel Medina, surfistas que tenían un talento increíble desde muy jóvenes. Para mí fue diferente: ir a la escuela, a la universidad y luego intentar lograrlo de otra manera. Tienes que tener mucha voluntad. Viajas al extranjero sin dinero, sin tener donde dormir… Literalmente, sin dinero. Aprender a vivir sin dinero es importante porque todo lo que consigas después te parece increíble. Por eso me encanta dar entrevistas, pues antes nadie quería hablar conmigo.

No espero ser famoso después de esto. Ahora voy a ir a Irlanda para surfear y reunir el dinero que me permita perseguir olas grandes de nuevo.

¿Puede un tipo tímido filmar las escenas que hiciste para Let’s Be Frank?

Me siento cómodo delante de la cámara. No me costó actuar. Lo más difícil fue la escena de la pelea. Soy surfista, no un actor, así que fui a Londres y entrené durante dos semanas con un director. Cuando empezamos Pete me decía: “¡Lo haces fatal!”. El día que tuvimos que filmar la escena había 50 personas. Al final disfruto con esa presión. Me imagino que es como hacer surf de olas grandes. Hay un gran día en el que tienes que ir a por la ola.

Has dicho que al principio no tenías dinero, pero esta película es una gran producción, en la que participan estrellas como John John Florence y Ben Harper. ¿Qué ha pasado?

Al principio sólo teníamos un vídeo de 15 minutos que tres años más tarde se convirtió en una película de 50 minutos. Es mérito de Pete. Nunca tuvimos un gran presupuesto, pero Pete hizo que pareciese que sí. En cada escena gastábamos todo el dinero pero como estaba saliendo tan bien conseguimos más presupuesto.

En cuanto a John John y Ben Harper. ¡Pues sí! John John es un gran amigo y lo de Ben Harper fue una locura… ¡No me lo esperaba! Como he dicho, ni siquiera pensé en que sería un surfista profesional. Y, desde luego, nunca soñé con que habría una canción de Ben Harper en mi película.

John John es un tipo tímido como tú. ¿Tuvo que repetir muchas veces su escena?

La escena es en Pipeline, en la casa del padre de Jamie O’Brien. El día del rodaje dije: “OK John, ha llegado la hora”. El problema es que las olas eran muy buenas. John John no las había visto todavía y Pete le estaba diciendo que dijese una frase tras otra. La gente en la playa no dejaba de gritar. John John me preguntaba: “Frank, ¿qué tal las olas?”. Yo le decía: “Están bien, no te preocupes”. Sabía que si veía las olas saldría al mar. Sí, la escena nos llevó unas cuantas horas.

¿Qué proyectos tienes para el futuro?

Disfruto delante de la cámara. He hablado con Red Bull para hacer algunas cosas más pero quiero ir paso a paso. Este invierno quiero disfrutar de buenas olas. Sería fantástico participar en algunos eventos del BWWT, pero no lo suelo hacer bien cuando hay mucho público. Me gustan los sitios remotos como Irlanda, donde el agua está fría y hay grandes olas. En ese ambiente me siento mejor.

Fuente: Red Bull