Es una tendencia mundial en el plano deportivo el complementar cualquier deporte con el gimnasio y la actividad física. En cualquiera de los deportes que vemos habitualmente en televisión se pueden apreciar “atletas” por arriba de los “talentosos” de la actividad en cuestión. El surf no escapa a esta tendencia y cada vez más son los surfers que se entrenan físicamente para tener un mejor rendimiento en el agua. Podemos observar un Mick Fanning, un Adriano de Souza, un Gabriel Medina o un Kelly que se nota que no descuidan ni un detalle de su preparación física.
En esta nota pretendemos orientar en algún punto a todos los surfistas acerca del acondicionamiento físico. Trataremos de abarcar todos los aspectos: desde los que nunca tocaron un gimnasio, para los que tienen una condición física aceptable y para quienes ya son expertos. Para esto hablamos con Francisco Tobías, entrenador de varios surfistas en la ciudad de Mar del Plata, quien tiene a cargo a profesionales, a surfistas de nivel medio, y también principiantes.
Para las personas que van por primera vez a trabajar en su físico, lo primero que tienen que hacer es saber sus limitaciones (hablar con el entrenador de turno para comentarle lesiones, si alguna vez tuvieron problemas cardíacos y cualquier cosa que les imposibilite realizar alguna actividad o ejercicio). Una vez realizado esto, el principal y más importante paso es fortalecer la zona media del cuerpo o el “core” que son los grupos musculares que más adelante van a ser los encargados de sostener no solo el propio peso sino también las cargas que vayan a levantar. Cuando hablamos de zona media nos referimos a los abdominales, los lumbares y los cuádriceps (si se fijan son los tres grupos musculares de mayor tamaño del cuerpo).
Una vez concluido el primer paso, lo siguiente es empezar a cargar con algo de peso los ejercicios y también empezar a fortalecer las demás musculaturas. Es de suma importancia en estos dos primero niveles conocer y perfeccionar la técnica de cada uno de los ejercicios para que las posibilidades de lesionarse sean las menores posibles.
El tercer nivel tiene que ver con sumar dificultades a los ejercicios anteriores. Trabajar sobre bases inestables, hacer ejercicios propiceptivos, realizar circuitos de fuerza y coordinación, y tomar decisiones bajo un alto nivel de strees físico sería algunos de los puntos más importantes que se deben tener en cuenta a la hora de entrenarse en un alto rendimiento.