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“Palo a palo, la mejor final que hemos visto en el ALAS”, “esto es histórico”, “fueron los cinco minutos más entretenidos que recordemos”, “el surf más completo que se ha visto en el ALAS”.Desde la cabina de transmisión, no cesaban los calificativos para describir lo que Luis María Iturria acababa de hacer en el agua. El uruguayo, líder indiscutible del Tour Latinoamericano, respondió con dos olas memorables los ataques de Jair Pérez en la gran final y se alzó con el título del Reef Classic Pilsener Light Montañita.

Se había surfeado ya la mitad de la serie de 25 minutos que definía al campeón, cuando Luis María tomó una buena ola desde la rompiente, hizo un bottom perfecto y atacó con un palazo que arrancó aplausos en la playa; nuevo bottom y nuevo golpe, uno tras otro se combinaban con roundhouses redondos. El uruguayo presentó en Montañita una actitud guerrera y un surf estilizado, de líneas perfectas. Los jueces premiaron su arrojo con un 9.

Las respuestas de Jair Pérez no se hacían esperar y ambos se enfrascaron en un duelo sin espacio para el descanso. Cuando el costarricense buscaba la ola que lo acercase en la pelea, Luisma tomó la ola definitiva: dibujó otra línea perfecta con la que pegó en la más riesgosa sección de la ola, volando en un aéreo que la playa entera coreó; un aterrizaje inmejorable le permitió buscar nuevamente la sección de mayor poder, donde encajó otro aéreo más, otra vez perfecto. Diez puntos para un total de 19 sobre 20 posibles. Aunque aún faltaba para el final, la historia estaba escrita.

Iturria fue uno solo con las olas, fluyó con una naturalidad que confirmaba las palabras que su amigo Martín Passeri había dicho momentos antes de la final: “Luisma está en su mejor momento competitivo. Su surfing era mejor que sus resultados, pero gracias a Dios este año ha podido demostrar lo que sabe”.

Tres finales consecutivas y dos títulos lo colocan en inmejorable posición a la cabeza del Tour Latinoamericano, un circuito que nunca antes ganó un uruguayo y que tiene en Iturria a su mayor estrella de la temporada. El reto es hoy más grande que nunca para él: el calendario 2012 consta de 13 etapas, su misión será mantener el nivel que nos ha regalado y entregarle a Uruguay el título que más ansía.

fuente: Prensa Alas