El surf francés ha encontrado en Jérémy Flores a uno de sus máximos referentes. Nacido en la isla de Reunión, aquel joven prodigio saltó al profesionalismo rodeado de grandes expectativas, acumulando podios en el World Tour y representando a Francia en los Juegos Olímpicos de Tokio. Sin embargo, la vida de Flores nunca ha sido un camino de rosas: fama, presión y dolor de cabeza—literalmente—han marcado su recorrido.
En 2021, con 33 años recién cumplidos y a punto de convertirse por segunda vez en padre, Jérémy anunció su retirada de la competición. Muchos celebraron un adiós triunfal, pensando en un retiro tranquilo tras una carrera brillante. Pero la realidad golpeó con fuerza: las migrañas incesantes y un cansancio extremo, sin explicación aparente, le obligaron a buscar respuestas médicas. El diagnóstico fue demoledor: un tumor en la base del cerebro.
La operación, realizada en octubre de 2022, fue un éxito técnico para los cirujanos, pero abrió un nuevo capítulo de incertidumbre: ¿cómo afectaría la intervención su memoria, su familia, su pasión por el surf? Frente a la adversidad, Flores no se rindió. En lugar de aceptar límites, trazó un nuevo objetivo: regresar al agua y volver a sentirse “en la cima”.
“Dos au Mur” es un retrato íntimo de ese proceso de reconstrucción. Desde las olas de su infancia en Reunión hasta los entrenamientos olímpicos, la película avanza en dos tiempos paralelos: los recuerdos de aquel niño que soñaba con competir en el World Tour, y el presente incierto de un atleta luchando por recuperar su salud y su ambición. La voz de Jérémy, sincera y sin filtrar, guía al espectador por momentos de alegría en tubos perfectos, pero también por la fragilidad de la recuperación médica.
Este documental es más que una historia de superación personal: es un canto a la resiliencia del surfista frente a lo imprevisible. Nos recuerda que cada ola conquistada lleva detrás horas de esfuerzo y, en ocasiones, una lucha aún más dura lejos de la cámara.
En un mundo donde el resultado suele primar sobre el proceso, “Dos au Mur” pone en valor el viaje interior de Jérémy Flores: sus dudas, sus miedos y, sobre todo, su determinación para seguir soñando. Porque, como él mismo confiesa, “no se sabe cuándo termina”, y cada ola, cada brazada y cada día al lado de la familia son un regalo que vale la pena defender